Cuidate
Nada mejor que una dieta sana y equilibrada para vivir feliz. La frase debe hacernos reflexionar, pues no es lo mismo comer sano que equilibradamente. Por sana debemos entender la ingestión de productos de primera calidad, de tal manera que si nuestra alimentación consta de alimentos con esta característica nuestra alimentación es sana, lo que no implica que sea equilibrada, pues para que lo sea debe contener los nutrientes necesarios en las proporciones adecuadas, entendiendo por alimento las distintas comidas que ingerimos y por nutrientes los componentes de cada alimento, o sea las proteínas, minerales, hidratos de carbono (glúcidos o azúcares), grasa, proteínas y vitaminas.